¿Tradición o modernidad? Juegos vs. deportes

La sociedad cambia, evoluciona, y el tiempo no espera a nadie. Ni siquiera a los juegos que han acompañado la infancia de nuestros antepasados. Aquellos juegos con los que nuestros abuelos y abuelas, bisabuelos y bisabuelas, tatarabuelos y tatarabuelas... crecieron y aprendieron tantos valores físicos, sociales e intelectuales, y con los que contribuyeron a mantener viva la tradición de cada pueblo y el vínculo entre la actividad física y la naturaleza. Sin embargo, la situación ha cambiado de forma considerable. Ya no pasamos largas horas disfrutando de la calle ni de las piedras y palos que nos ofrece y con los que podemos inventarnos infinidad de juegos. Ahora la calle ha pasado a ser la casa de cada uno, las piedras y palos se han convertido en aparatos tecnológicos y la socialización se da a distancia. Así, el poco tiempo que invertimos en actividad física queda reducido a los gimnasios y, especialmente, a los deportes, que han conseguido pasar a ser un elemento esencial en la sociedad actual. 
Como ya sabemos, la escuela es un reflejo de la sociedad y ella no iba a ser menos. Tampoco se ha quedado atrás y la Educación física ha evolucionado paralelamente. Estoy segura de que si preguntase a varios estudiantes de Educación Primaria sobre los contenidos que les enseñan en esta materia, pocos o prácticamente ninguno diría juegos tradicionales, ni me sabrían nombrar cinco ejemplos de su propio pueblo. La mayoría hablarían de contenidos como las normas del fútbol y el baloncesto, las técnicas del rugby y el balonmano... y otros aspectos vinculados a los deportes más populares y destacados de la sociedad actual. Y dicho esto yo me pregunto: ¿Es incompatible el tratamiento de los juegos tradicionales y los deportes en la Educación física? ¿Por qué enfrentarlos pudiéndonos quedar con los beneficios que ambos nos ofrecen?. A continuación mostraré mi punto de vista acerca de ambas cuestiones. 

¿ o ?

En primer lugar, me gustaría destacar una vez más el objetivo de la escuela: perseguir la educación integral, basada a su vez en el desarrollo socioemocional, cognitivo y psicomotor del alumnado. También quiero dejar constancia de la escasa importancia que se le otorga al juego en el desarrollo de los niños y niñas, y de la errónea creencia de que la Educación física sirve únicamente para hacer algo de ejercicio. Ahora sí, partiendo de estas tres afirmaciones, me gustaría destacar los beneficios que tiene el tratamiento de los juegos tradicionales y de los deportes para los estudiantes en la materia de Educación física. Por una parte, los juegos tradicionales son una gran herramienta de socialización, contribuyen al desarrollo físico, emocional y de la imaginación, y suponen una importante fuente de vivencias. Por otra parte, el deporte es una herramienta que favorece la salud física y psicológica, así como el desarrollo social de los individuos que lo practican. Como puede verse, ambos contribuyen a su manera a ese tan perseguido desarrollo integral. Por tanto, vuelvo a plantear la misma pregunta: ¿Por qué enfrentarlos?
Considerando todo lo expuesto en los párrafos anteriores, ambos contenidos deberían tratarse por igual. Si es cierto que la escuela y, en consecuencia la Educación física, debe responder a las demandas sociales. En este caso los deportes que, bajo mi punto de vista, se mueven principalmente por un factor económico. Sin embargo, no debemos olvidarnos de que lo que realmente importa es el desarrollo de los niños y niñas que serán el futuro de la sociedad. Siendo realistas, los deportes tienen diversos beneficios pero, también tienen aspectos negativos que no se ven tan marcados en los juegos tradicionales. Por ejemplo, para mí los juegos tradicionales suponen un espacio que se centra más en disfrutar el propio juego, es decir, pasarlo bien, aprender, cooperar y desarrollar la creatividad, etc., mientras que los deportes (sobre los que hoy en día hay un fanatismo exagerado) se mueven más por conseguir el objetivo, promoviendo así la competitividad e incluso la agresividad en algunos casos, dejando en segundo plano el disfrutar del deporte en sí o las relaciones sociales. 
Además, otro de los aspectos que me parece importante destacar es la importancia de la inclusión en la educación actual. Cada vez se busca favorecer la inclusión de todos los individuos, independientemente de sus características físicas, psíquicas, culturales o socioeconómicas. De esta manera, considero que los juegos tradicionales tienen un mayor nivel de inclusividad en tres aspectos: Respecto a la diversidad funcional, ya que hay multitud de juegos tradicionales que se pueden adaptar a esta. Si bien es cierto que muchos de los deportes más relevantes tienen normas adaptadas y competiciones especiales para las personas con diversidad funcional pero, en una clase de Educación física es más complejo adaptarlo cuando únicamente hay uno o dos estudiantes. En cuanto al factor socioeconómico, los juegos tradicionales se adaptan en mayor medida a todos los estudiantes, ya que en muchas ocasiones, el material empleado es de la naturaleza o material reciclado hecho a mano. Por tanto, no exigen un nivel adquisitivo determinado. Por último, me gustaría hacer referencia a la diversidad de género, sobre la que todavía existen gran cantidad de prejuicios en el ámbito del deporte. Por el contrario, no existen juegos tradicionales que se consideren de hombres o de mujeres. 
Con todo esto no quiero decir que se le ha de restar importancia al deporte, sino sumar a este tipo de juegos que, en muchos casos, son el origen de los actuales deportes. Por ello, considero la compatibilidad de ambos en las prácticas de Educación física y en el día a día del alumnado. De tal manera que, además de la práctica de deporte en las horas de Educación física, se fomente la práctica de juegos tradicionales bien en el horario y aula ordinaria, bien mediante algún plan de fomento que implique salidas fuera del centro a parques o espacios abiertos, que supongan una novedad para el alumnado y, de este modo, que aumente su interés hacia ellos. 
Tras todo lo reflexionado anteriormente, concluyo diciendo que no debemos privar al alumnado de todo aquello que sea favorecedor para él. Debemos tener la mirada puesta en el futuro, pero sin olvidar de donde venimos bien sea para no cometer los mismos errores, bien sea para no perder aquellas tradiciones sobre las que se fundamenta la identidad y cultura de un pueblo. 




Comentarios

  1. JESÚS PÉREZ VIOLERO EVALÚA:

    Buenas Cristina!

    Antes de comenzar, me gustaría decir que estoy de acuerdo contigo en todo lo que has explicado. Lo has explicado a la perfección.
    En primer lugar, nos introduces el tema con una comparación que me ha gustado mucho: "Ahora la calle ha pasado a ser la casa de cada uno, las piedras y palos se han convertido en aparatos tecnológicos y la socialización se da a distancia". Desgraciadamente, así se vive hoy en día.
    En segundo lugar, nos comparas los juegos tradicionales con los deportes populares. Pienso igual que tú, porque si vas a una escuela y preguntas a que quieren jugar los niños, y la mayoría, te van a decir algún deporte como el fútbol, el baloncesto, el balonmano. Por otro lado, es una lástima que los juegos tradicionales a los que jugaban nuestros abuelos o nuestros padres, se estén perdiendo poco a poco.
    En conclusión, hubiera puesto alguna imagen más. Pero, me ha parecido una entrada muy buena Cristina.

    Mi calificación es un 9'75.

    Un saludo.

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  2. Hola Cristina.
    Desde mi punto de mi vista, me ha parecido una entrada muy interesante que muchos docentes y compañeros deberían leer.
    En primer lugar hablas sobre cómo está la calle en la actualidad y en la segunda nos comparas lo que están viviendo los alumnos en las escuelas.
    No puedo estar más de acuerdo contigo en todo lo que has dicho, ya que en mi barrio está pasando absolutamente todo lo que has descrito. Los niños siguen en su pelea por demostrar quién es el mejor en los deportes modernos actuales y las niñas se pasan horas y horas intentando ser las más divas para hacer un par de "tik toks" en el parque. Por no hablar de la inexistencia de juegos tradicionales por parte de estos niños y la poca presencia en las aulas de Educación Física actuales... a este paso van a desaparecer de verdad.
    En cuanto al diseño, a primera vista me ha gustad mucho el blog. buena organización, buen diseño, no hay problema en la lectura de las entradas y no detecto tampoco ninguna falta de ortografía, así que mi nota en esta primera entrada es de un 10.

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